José Luis González Villaverde: al Angliru fui a lo desconocido y
lo que me encontré superaba con creces lo imaginable
A José Luis González Villaverde (Oreña, Cantabria, 1966) vencedor de la primera edición del Angliru no se le ha olvidado aún el sufrimiento padecido en octubre de 2001. De su memoria aún no se ha borrado la sensación de enorme dureza de la prueba. Y lo afirma un cantero de profesión.
Algún periódico de la época informaba de la prueba afirmando que José Luis González Villaverde, un ex futbolista llegado al atletismo pasada la treintena, había ganado con la gorra. Ver al corredor cántabro lucir esa prenda con la que corre siempre ofrecía un sin duda muy buen titular pero estaba un poco alejado de la realidad. La victoria no le resultó en absoluto fácil.
Habitual del cross tras su tardía llegada al atletismo y con siete campeonatos de Cantabria entre largos y cortos en su poder, y acreditado en 2:21:46 en el Maratón de Laredo de 1998, nos recuerda también unos estupendos 1:04 en un medio maratón no homologado que afirma fue en Burgos, pero que quizás no fueran en esa prueba y si en alguna otra de 21,097 km. Asiduo de la Subida al Naranco ovetense y sobre todo de la Peña Cabarga, el Angliru le sorprendió y le resultó “durísima. La desconocía todo de ese puerto. Nada sabía de él pero por supuesto que nada más conocer la celebración de la carrera me animé a realizarla. Una vez allí me pareció no dura, sino súper dura”. Al recordarle su victoria y además sobre gente importante de la época y otros que conocían la subida comenta que “creo la niebla me ayudó bastante, pues aquello era una curva cerrada y otra subida brutal, curva estrecha y otra subida. Era como un no acabarse nunca”.
El discípulo de “Chuchi” Puente, José María Puente, destacado especialista en 400 m.v. de la década de los ochenta y a quien se refiere como un gran entrenador y una bellísima persona, recuerda que le comentó el atleta gallego Elisardo de la Torre, segundo clasificado, “que quizás le había ganado por capacidad de sufrimiento” una capacidad que destaca “como esencial para quienes preparen el Angliru”.
José Luis “más de pueblo que las amapolas” en expresión que utiliza sin ningún rubor, llegó a la atletismo tras una lesión en la rodilla que pese a las numerosas visitas a especialistas no lograron solucionarla. Otra lesión también de rodilla le retiró de la práctica atlética y tras varios años alejado del circuito atlético, regresó de nuevo sorprendiendo a todos con su estado de forma y sus victorias en numerosas carreras incluidos algún trail. El propio corredor también se sorprende de esos resultados. No esperaba volver “en ese estado de forma”.
Preguntado si volverá al Angliru deja abierta la puerta a su participación en una prueba “dura y preciosa y distintas a todas las demás” y asegura que en cualquier caso estará “aunque sea colaborando” pues fue una gran huella la que dejó en él “como también la Subida al Desfiladero de la Hermida o el Medio Maratón del Bajo Pas, otras de sus carreras preferidas. Contar con alguien que puede alardear, y no lo hace, de haber corrido en 29.46:03 el 10.000 sería un lujo.
Isaías Díaz Peña
Pasión por la Carreras y gusto por la historia.